“Si a duras penas me entiendo yo, cómo va a tener alguien que no me conoce la solución a todos mis problemas. Qué se supone que uno debe decir, cuáles son las respuestas correctas. Y si se rie de mi o me juzga. Además, cómo le cuento yo a mis papás, donde se enteren mis amigos…van a creer que estoy loco”. Si te has hecho alguna de estas preguntas, probablemente sientas miedo a ir al psicólogo.

Por lo general, antes de consultar por primera vez aparecen preguntas que generan miedo. Estos pensamientos son normales, el temor es una reacción común cuando nos enfrentamos a situaciones desconocidas. Sobretodo cuando frente al tema todavía existen numerosos estigmas, concibiendo el pedir ayuda como falta de valentía o incapacidad.

Ahora bien, creo que uno de los problemas principales es que las personas no saben realmente cuál es la función del psicólogo, qué puede hacer y cómo es la forma de trabajo. Con este artículo pretendo ayudarte a aclarar algunas dudas.

Un especialista como cualquier otro

Un psicólogo es una persona que se ha formado y se encuentra en la capacidad de ayudar a que los demás a confrontar diferentes problemáticas, logrando encontrar formas de tolerar, transformar, modificar, eliminar, aceptar y comprender el porqué de dicha situación, conflicto, malestar, emoción, pensamiento o actitud.

El psicólogo genera un espacio de bienestar, empatía y aceptación en el cual promueve el diálogo en condiciones de confianza. Se ha preparado para lograr adentrarse en el discurso del otro y de esta forma identifica elementos que se pasan por alto y que por lo general no significan nada para la persona que los dice.

La escucha activa es la principal herramienta que tiene el psicólogo. Este puede apoyarse en diferentes test, herramientas, material práctico y didáctico para orientar, comprender y acompañar a sus pacientes.

El mejor es aquel con quien tu te sientas cómodo

En la actualidad, existen más de 250 modalidades de psicoterapia para todo tipo de pacientes. Podrás encontrar a unos más activos, otros que por medio del silencio buscan la introspección y la elaboración de un análisis propio y son un poco o mucho más pasivos.

Encontrarás algunos que te hablarán como “un amigo”, y quizás otros te pongan tareas, actividades o propicien espacios de alta participación. Dependerá entonces del psicólogo, de sus intereses en cuanto el marco teórico en el cual se ubique cómo será esta escucha y cuál será su rol frente al consultante.

Tu primer compromiso contigo mismo es elegir alguien que te genere confianza, de esta manera evitarás sentir miedo de ir al psicólogo. No hay un mejor o peor especialista, ninguno posee una fórmula mágica ni tiene la última palabra, pero todos buscarán darte herramientas con ánimos de facilitar tu proceso.

No voy a juzgarte, no estás loco

Cada persona puede tener motivos diferentes para ir al psicólogo, enumerarlas creo que sería ambicioso y sin propósito alguno. Podrías ir porque sientes que tienes relación tóxica, algún problema de orden sexual, una mala comunicación, una infidelidad. Podrías ir porque posees dificultades para dormir o duermes en exceso. Tienes dificultades con la forma en que te relaciones con la comida, te irritas facialmente, te consideras poco valioso, o eres víctima de algún tipo de acoso.

También puedes ir porque quieres conocerte, entender aspectos de tu vida que te generan inquietud o simplemente vas de vez en cuando a una revisión general. Si, así tal cual vas al oftalmólogo o al odontólogo.

No hay una razón más válida que otra. En pocas palabras puedes ir por la razón que quieras así la consideres una “bobada”. Muchas veces, desde mi experiencia, es justo esa “bobada” una fuente de malestar y displacer muy poderosa en la vida del consúltate.

Consejos para vencer el miedo

En mi opinión, creo que hay diferentes causas por las cuales el psicólogo no es valorado como debe ser y tenido en cuenta dentro de la vida de las personas que poseen alguna dificultad, pero una de las más relevantes y que mayor poder tiene es el desconocimiento, por eso infórmate, pide referencias, escucha historias.

Apóyate en las personas que te rodean, se constante en el proceso y si te gusta escribir haz un seguimiento para registrar tus avances. Quítale el misterio, piensa que es como ir a donde cualquier otro médico que quiere ayudarte a sanar. El miedo a ir al psicólogo es un tema que podrías abordar como primer motivo de tu consulta.

¡Si deseas saber más, contáctanos!